Hace poco se celebró una reunión entre Gayoso y Orol, que ya conocéis todos, en la que el segundo no aceptó unificar las candidaturas a la FGP. Aunque hay un recurso en marcha, sin que haya fallo o no sea favorable al Club Tambre, como se explica en el artículo anterior, el próximo presidente de la Federación Gallega de Pesca será Gerardo Orol, como diría José María García, Gerardo, Gerardito, Gerardete...
Después de dicha reunión se quedó entre los cuatro asistentes en no desvelar lo que allí se habló, pero parece que se ha omitido tal acuerdo, con lo que se pueden contar algunas cosas. Por ejemplo lo de las dietas. Fue uno de los argumentos de Orol, el reparto de las dietas.
Mal empezamos. Hay que ahorrar, y eso, Sr. Presidente, lo tiene que empezar a hacer precisamente con las dietas. Si tienes un campeonato en Estaca de Bares, te vas por la mañana, y te ahorras el hotel, que esto no es la costa del Pacífico. Una cosa son los deportistas, por los que hay que trabajar y, por sus éxitos, buscarles comodidad, pero el primer punto que tendrían que hacer los federativos que tomen el relevo es ahorrar en dietas en Galicia. Salir fuera de la autonomía es otra cosa, evidentemente.
Uno de los argumentos expuestos por el candidato Orol fue, además, el hecho de que para él no tenía demasiada importancia ni transcendencia el aumentar el número de federados. Sólo competición (lleva cinco jueces en la candidatura), cosa que me parece estupenda, ya que son una federación deportiva pero, y sigo con mi caballo de batalla, tan pronto lleguen a la presidencia, que no cobren la subvención de Medio Ambiente, que la cobre Proxecto Ríos de Adega y se la den a sus voluntarios para equiparlos, por ejemplo, o a Pescadubra, para que hagan más jornadas como la suya por toda Galicia, o a Pablo Caballero, para que lo gaste en lo que quiera en el Mandeo, alevines, benjamines o cadetes, o dotando a su guardería para que siga limpiando el río de furtivos que todos conocen y nadie denuncia. Si finalmente Orol decido apostar sólo por el deporte de competición, tendremos una federación deportiva "al uso", como la de baloncesto o balonmano. Y eso no es malo, para nada, pero hay un componente no competitivo en el mundo de la pesca que van a tener que dejar de lado si son fieles a lo que piensan. Así las cosas, los que no estamos federados pero tenemos licencia de pesca, más de 60.000 pescadores, no tenemos por qué atender a lo que haga la federación, en todo caso hay que buscar a otra entidad que nos represente.
Y vemos lo que hay en los comités, las apuestas de supuestos pescadores conservacionistas que tienen sus ríos hechos unos trapos, su interés personal, el odio absoluto de personajillos que causan hasta risa en el colectivo. En breve hablaremos de un par de sociedades que están hundiendo sus propias cuencas fluviales. Como lo leéis. Por la pesca en Galicia y por los pescadores, repito por la Pesca y los Pescadores, con mayúsculas, sólo miran los de siempre. Menos mal, porque si fuera por algunas propuestas de algún manguta, nos echaban de los ríos. Un día dijeron de un amigo "es que sólo defiende a los pescadores". Coño, pues para eso estamos ¿no?