Durante un tiempo he venido tomando decisiones dentro del Grupo Miguelpesca, fundamentalmente porque así me lo pidieron. Tenemos un buen ambiente entre periodistas y profesionales. Joaquín España, Miguel Piñeiro, Juan José Moralejo, Fernado Cobo... Estamos en Galicia y queremos lo mejor para Galicia, pero algunos de los componentes de este grupo están fuera, como España en Madrid, o Javier dirigiendo La Tribuna de Albacete, y no me olvido en esta lista de un gallego en Burgos, Lorenzo Matías, uno de los directores de Promecal.
Nuestro valor es la amistad y, sin ser una empresa, hemos ido dando pasos, con el aval del trabajo, para conseguir, por ejemplo, un periódico, el Trueiro, para el pescador. Antes hacíamos un encuentro de prensa, suspendido este año por la crisis y que retomaremos en breve, en Vilagudín.
Paralelamente surgió otro en Chulilla, Valencia, al que yo nunca he ido.
Nosotros, en Vilagudín, no hemos manejado nunca dinero. Ayuntamiento, Hotel Barreiro y Galipesca pagaban todo a los periodistas, que a cambio hablan de las excelencias de la zona.
Un encuentro de prensa "normal", vamos.
A estos encuentros siempre se quiere colar todo el mundo, es normal. No se paga un duro y además te llevas regalitos.
Nosotros siempre hemos intentado que la gente se sintiese bien y sólo esperábamos que se valorase el trabajo, cosa que no siempre hemos recibido.
No estuve en Chulilla, pero sí Eduardo Fontela, de Cucharillas Edu, que me contó que, en un momento de la comida, un periodista, que había estado en Vilagudín dijo "esto sí que es comida, y no lo que nos dan en Galicia" menospreciando a Vilagudín y, sobre todo, a nosotros.
Me quedé alucinado con el desprecio. Alucinado.
Cuando Eduardo me comentó esto, hablé con Piñeiro y le dije: "Éste no viene el próximo año".
Y no vino.
Ahora se dedica a poner verde a Miguel, sin razón alguna y sin el guante blanco que debe caracterizar a la profesión, pero además tiene arrestos para citar a su "amigo del blog", que soy yo, evidentemente, en una especie de "todo vale" que no estoy dispuesto a aceptar, sobre todo porque, a mí, las truchas de León, me quedan lejos y casi no bajo a pescarlas. Tengo bastante con lo mío, pero parece que a otros no les llega lo que tienen o creen tener.
¿Para eso han servido 40 años en la radio, para un proceder de navajero de las palabras? ¿Qué opinión tienen colegas tuyos de la casa en la que tanto tiempo estuviste? ¿Les parecen formas de proceder de un periodista contra otro? ¿Cómo se puede decir que MiguelPesca quiere esto o lo otro sin tener ni idea? ¿Moralejo y Cobo, acaso quieren presidir la federación?
No me lo hubiera esperado precisamente por el valor que hay que darle a esta profesión, como no me esperaba los comentarios en Chulilla, por eso, simplemente, no viene, ni vendrá a Vilagudín.
Ya me encargo personalmente del tema, como hice en su día.
Éche o que hai, que dicen en mi pueblo.